En la industria de la belleza, cada vez más personas están optando por marcas de maquillaje que se adhieren a principios éticos y respetuosos con los animales. Estas marcas, conocidas como “cruelty free”, se comprometen a producir productos libres de crueldad animal, lo que significa que no realizan pruebas en animales en ninguna etapa de desarrollo del producto, desde los ingredientes hasta el producto final. Esta práctica es común en la industria cosmética, lo que ha llevado a un aumento en la demanda de alternativas éticas y respetuosas con los animales.
La demanda de maquillaje “kind” ha aumentado significativamente en los últimos años, ya que los consumidores se vuelven más conscientes de las prácticas éticas en la industria de la belleza. Estas marcas han demostrado que es posible lograr una belleza impecable sin causar daño a los animales.
Algunas de las marcas más reconocidas en el mundo del maquillaje “animal friendly” incluyen empresas como Beauté Mediterranea, Too Faced, Urban Decay o 3INA. Estas marcas ofrecen una amplia gama de productos de maquillaje, desde bases de alta cobertura hasta labiales, todo ello creado sin causar sufrimiento animal.
Es posible lucir radiante sin poner en peligro el bienestar animal. (PEXELS)
Además de no probar en animales, estas marcas también se preocupan por la selección de ingredientes veganos y sostenibles. Muchas de ellas utilizan fórmulas naturales y orgánicas, evitando el uso de químicos agresivos y productos derivados de animales. “Los ingredientes seleccionados se testan en piel sintética (in vitro) e in vivo en humanos, al igual que el producto terminado”, confirman desde Beauté Mediterranea.
La elección de marcas de maquillaje “cruelty free” no solo beneficia a los animales, sino que también es una forma de mostrar apoyo a la producción ética y sostenible. A medida que aumenta la demanda de estos productos, más empresas se están sumando a esta tendencia y adaptando sus prácticas para cumplir con los estándares.
Los consumidores que optan por marcas de maquillaje “kind” están enviando un mensaje claro a la industria de la belleza: es posible lucir radiante sin poner en peligro el bienestar animal. Esta tendencia no solo refleja un cambio en los hábitos de consumo, sino que también un mayor compromiso sobre los derechos de los animales.
Esta opción de consumo hace que la belleza y la compasión puedan ir de la mano. (PEXELS)
Estas marcas demuestran que la belleza y la compasión pueden ir de la mano, brindando a los consumidores la opción de sentirse bien consigo mismos y con el mundo que los rodea.
Una de las marcas que se ha unido a esta manera de disfrutar el maquillaje es Beauté Mediterranea, una marca de cosmecéutica vegana, sostenible y ética inspirada en el Mediterráneo. El compromiso por el cuidado al entorno ha conducido a Beauté Mediterranea a integrar valores de respeto a todos los ecosistemas generando un triple impacto, social, medioambiental y de crecimiento económico sostenible.
“La naturaleza tiene muchas cosas que aportar a nuestra salud y la clave es identificar cuáles son los mejores ingredientes para la necesidad de la piel”, asegura el equipo. Todos los productos y procesos de la marca se basan en el respeto de la piel, del medioambiente y de las personas, son de origen vegetal y buscan minimizar el impacto negativo a través de diferentes compromisos.
Otra firma que no testa en animales y que apoya el desarrollo sostenible es 3INA, esta marca presenta productos veganos y “cruelty free”. La filosofía de 3INA se basa en la creencia de que la belleza no debe estar en contra del bienestar animal. La marca utiliza ingredientes de origen vegetal y fórmulas libres de crueldad, sin comprometer la calidad ni la eficacia de sus productos. La firma ha recibido certificaciones como la del programa «Cruelty Free International» y ha sido incluida en la lista de marcas “cruelty-free” de PETA (People for the Ethical Treatment of Animals)
A medida que aumenta la demanda de estos productos, más empresas se suman. (PEXELS)
Kiko Milano se ha destacado en la industria por su compromiso inquebrantable con la ética y el bienestar animal. Con una filosofía “cruelty-free” arraigada en su ADN, Kiko Milano se ha ganado la confianza de millones de consumidores conscientes y amantes de la belleza en todo el mundo. Milano ha obtenido diversas certificaciones y reconocimientos que validan su compromiso. Entre ellos se encuentra la certificación de «Leaping Bunny» de Cruelty Free International, una de las organizaciones líderes en la lucha contra la experimentación animal en la industria cosmética.
La empresa Urban Decay ha confirmado que es “species friendly”. No testan en animales y, por lo tanto, no prueban los productos acabados o los ingredientes en animales, ni tampoco lo hacen sus proveedores o terceras partes. Desde su fundación, la marca ha estado en contra de la experimentación animal y ha sido una de las primeras marcas en adoptar una postura firme en este tema. Urban Decay ha obtenido varias certificaciones y reconocimientos que respaldan su compromiso con la no crueldad animal. Una de las certificaciones más destacadas es la otorgada por el programa «Leaping Bunny» de Cruelty Free International, una organización líder en la lucha contra la experimentación animal en la industria cosmética.
(Texto: Pilar Martín)