Durante tres años, el popular cantante dominicano Héctor Acosta «El Torito» ha combinado su exitosa carrera en los escenarios con su compromiso como senador estatal en su país, lo que espera seguir haciendo porque buscará la reelección dentro de un año.
Acosta, que está en medio de una gira por Estados Unidos, es el primer artista electo al Senado de República Dominicana, -los cantantes Johnny Ventura y Sergio Vargas fueron diputados- cargo que buscó -dice- porque la provincia donde nació y creció se había quedado rezagada.
«Mi provincia merecía un cambio, no veía los avances, no teníamos las instituciones que debería tener una provincia», comenta a EFE el intérprete de exitosas bachatas como «Mi niña», «Me duele la cabeza», «Mi gran amor», entre muchas otras, al recordar por qué incursionó en la política.
Acosta, que hizo campaña por el Partido Revolucionario Moderno en medio de la crisis de salud causada por la covid, celebra el próximo miércoles su tercer año como senador de la provincia Monseñor Nouel, a la que espera seguir representando.
Para Acosta, se trata de evitar que su provincia “vuelva al retroceso después de lo que hemos avanzado y las demás propuestas (que significan) volver atrás».
Asegura que pese a sus tres años en el Senado, la política no le ha enamorado y que la música sigue siendo prioritaria. «Hay cosas de la política que no me gustan. No soy político, soy un comunitario, me gusta servir a la gente, al más necesitado. No estudié Ciencias Políticas pero sí estudié en la calle el saber la necesidad que tiene un pueblo y cómo puedes ayudarlo sin tener que ser corrupto ni robar el dinero del pueblo», señala.
Fotografía cedida hoy por Manny Zoom que muestra al cantante dominicano Hector Acosta El Torito durante un concierto en Nueva York. (EFE)
De la política dice que ha aprendido que los seguidores de los artistas «son más sinceros, más fieles, más reales. La política se presta para muchas cosas y los seguidores se pueden ir de tu lado. En la música no. Los fanáticos del Torito tienen 32 años siguiéndolo, venga quien venga».
También dice que ha tenido el respeto de dominicanos que militan en otros partidos «porque he tenido el privilegio de cantar a todos» así como de los senadores de la oposición que han apoyado propuestas suyas en la Cámara Alta.
«Pero -agrega- mi prioridad es la música y no la he soltado en estos tres años» y si el pueblo no apoyara su reelección «le dedico entonces (a la música) las 24 horas los siete días de la semana».
Por ahora, dedica de jueves a domingos a los escenarios, -martes y miércoles al Senado- razón por la cual regresó a Nueva York para presentarse junto a El Gran Combo de Puerto Rico «una institución que merece el respeto de todos» en un concierto de verano organizado por la ciudad, tras lo cual continuará la gira en EE.UU. que termina en noviembre en su país en la que promueve su nuevo disco «Este soy yo» que publicó el pasado año.
Acosta, que se dice fanático de la salsa clásica, manifestó además su orgullo por el progreso que ha tenido la diáspora dominicana en Nueva York, donde son dueños de restaurantes, salones de belleza, supermercados, compañías de taxis, hasta conseguir incluso un congresista federal.
«Estoy orgulloso de mi comunidad, son gente trabajadora que se preocupa por los que dejaron allá y por eso trabajan tan duro acá. Han logrado cosas importantes como elegir al congresista Adriano Espaillat y tener al comisionado de Transporte (Ydanis Rodríguez)», indicó.
«Quién sabe si algún día tenemos un alcalde dominicano en Nueva York (como ha ocurrido en otras alcaldías) si seguimos trabajando y haciendo las cosas bien hechas», afirmó el senador y cantante.