La gastronomía dominicana sigue evolucionando y posicionándose en el radar culinario Iberoamericano. Eventos como Expogastronómica, la convención de la industria gastronómica y hotelera más importante del Caribe, o el Flavor Fusion Fest, en el que se buscará el récord Guinness al sancocho más grande del mundo, son algunos de los realizados este año que confirman que el país avanza a pasos firmes en materia de arte culinario.
En esta labor, la Academia Dominicana de Gastronomía (ADG) ha jugado un papel importante. Diario Libre conversó con su presidente, Luis Ros, para conocer más sobre la labor que realiza la entidad que realiza y planes futuros para seguir impulsando la gastronomía criolla.
¿De qué se encarga exactamente la Academia Dominicana de Gastronomía?
La Academia Dominicana de Gastronomía es una institución sin fines de lucro. Es una iniciativa de la Academia Iberoamericana de Gastronomía, que tiene sede en España. Nos encargamos de realizar investigaciones, reconocimientos, divulgar informaciones importantes sobre la historia de nuestra gastronomía. Todo esto siempre de la mano del Gobierno, que es el actor fundamental en promover aspectos culturales como la gastronomía, sobre todo por la incidencia de la gastronomía en el turismo.
¿Cuál es el mayor reto que enfrenta la academia actualmente?
Las cocinas de Iberoamérica más posicionadas actualmente son la mexicana, la peruana, y en menos orden la argentina y la colombiana. Lo que pasa con la dominicana es que los turistas no van a ninguna ciudad del mundo a visitar un restaurante de cocina dominicana, pero sí de peruana, argentina o mexicana. Entonces, queremos cambiar eso, y para cambiarlo hay que poner la gastronomía dominicana en el escenario internacional.
Y lo están haciendo…
Sí, cuando identificamos personas o instituciones que están desarrollando iniciativas positivas, aunamos esfuerzos con ellos para potenciar todo lo que están haciendo. Lo próximo que tenemos a la vuelta de la esquina es el Flavor Fusion Fest, que se celebrará el 25 de noviembre en el Parque del Este (Santo Domingo Este), escenario en el que se cocinará el sancocho más grande del mundo para obtener un récord Guinness. Ese mismo grupo, compuesto por la chef María Marte y los esposos Amilkar y Pamela Gonell, ya logró el mangú más grande del mundo.
Al momento, ¿cómo ve el nivel de la gastronomía dominicana?
Nosotros tenemos muchos productos, somos un país autosostenible, porque producimos todo lo que comemos y lo mejoramos con algunas cosas que importamos. Nuestra cultura gastronómica es muy diversa… Si bien hemos avanzado mucho en términos de combinar alimentación con presentación, entiendo que lo que nos falta tiene que ver con el arte culinario, presentar nuestros platos de forma apetecible para el que no está relacionado con nuestra cultura. Nosotros vemos un sancocho y se nos hace agua la boca porque lo llevamos en la sangre, pero una persona que no tenga conexión cultural con ese plato puede preguntarse “qué es esto”, al ver un caldero lleno de carnes y víveres.
República Dominicana está nominada en varias categorías de los II Galardones Iberoamericanos de Gastronomía. ¿Cuál fue el proceso para lograr esas nominaciones?
Los nominados los proponen las academias y se eligen los ganadores en una asamblea. Los galardones reconocen los pilares saludable, solidaria, sostenible y satisfactoria. En la parte saludable propusimos al doctor Alejandro Bonetti, gastroenterólogo que dirige el Aula de la Dieta Mediterránea, que es parte de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Andalucía Oriental. En el renglón sostenible propusimos al chef Carlos Estévez que tiene muchos años trabajando con el “slow food”.
En la parte de solidaridad, al Banco de Alimentos de República Dominicana, que viene haciendo una labor importante para que haya menos desperdicios y lleguen alimentos a un mayor grupo de la población. En la categoría de satisfactorio propusimos a la Asociacion Dominicana de Restaurantes (Aderes), porque están haciendo un gran trabajo respecto a la promoción de la gastronomía dominicana y elevar las propuestas a través de los proyectos SDQ Gastronómico y el Restaurant Week.
¿Podrá República Dominicana en un futuro no muy lejano entrar a la lista de Los 50 Mejores Restaurantes del Mundo?
Entiendo que estamos listos, el problema es que el país todavía no está en el mapa de los 50 Mejores Restaurantes del Mundo, porque hay marcas que lo patrocinan y van a los países que consumen más sus productos. Pero sí, aquí se está haciendo el esfuerzo.
¿Cuáles son los planes de la academia para seguir impulsando la gastronomía en el ámbito turístico?
Entre las cosas que estamos haciendo, estamos trabajando en la tercera edición de la Guía Gastronómica Dominicana y en una plataforma virtual de reservas para restaurantes, con características interesantes, que ayudará a potenciar toda la actividad del turismo del ocio y de la gastronomía. También estamos hablando con la gente de la Guía Macarfi, en España, que es una guía de restaurantes que entendemos que es perfectamente replicable en República Dominicana. Estamos hablando con ellos para implementarla en el 2024 para llevar la evaluación de restaurantes a otro nivel.